Once niños guineanos de entre 4 y 16 años pasarán este verano en Navarra en conviviencia con familias de acogida. El contingente, que ha podido desplazarse a España gracias al trabajo de la ONG Amamayte, aterrizó el martes en Noáin y permanecerá en la Comunidad foral hasta el 14 de septiembre. Con ellos voló Sebastián Angüé, padre de algunos de los niños y persona de contacto de la asociación en el país africano. Angüé regresará en septiembre para llevar de vuelta a su país a los niños.
Según señaló la responsable de las familias de acogida, Elena Sagaseta de Ilúrdoz Bengochea, "éste es uno de los momentos más felices del año, para ellos y para nosotros". Los niños, muchos de ellos con relación consanguínea entre sí, son originarios de poblados y familias muy desfavorecidas del continente y responden con cariño a la acogida en tierras forales. "Para muchos no es el primer año y ya sienten que ésta es su familia navarra". Elena Sagaseta de Ilúrdoz, por ejemplo, destaca la relación asentada, bien vía telefónica o bien a través de las cartas, que se mantiene durante todo el año.
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Imagen de la recepción de los niños guineanos a su llegada al aeropuerto de Noáin. CEDIDA
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